Manifiesto a la Nación

"El misterio del amor es más grande
que el misterio de la muerte"
Oscar Wilde

Hoy es 5 de junio, día de luto para el pueblo mexicano: Una vez más han doblado las campanas y se han soltado al cielo miles de globos blancos en memoria de quienes no debieron morir.

Hoy 5 de junio de 2011 se cumplen dos años del horror, del crimen de Estado que nos arrebató las tiernas vidas de nuestros 49 niños y niñas, mártires sacrificados ante el altar de de la corrupción y la impunidad, erigido por la asociación delictiva entre los gobernantes y sus socios, parientes y amigos para obtener ganancias a toda costa.

Han pasado ya 730 largos y penosos días en los que nuestras venas abiertas no han dejado de sangrar ni uno solo de ellos, en espera de que se cumpla nuestro anhelo de justicia. Una y otra vez hemos exigido ante todas las instituciones del Estado mexicano justicia, justicia ejemplar, completa, expedita e imparcial, a través de procesos penales transparentes en contra de todos los que resulten culpables y responsables por los asesinatos y las lesiones de nuestros niños y niñas. Y las instituciones, desde los ministerios públicos, las procuradurías y los juzgados, hasta la corte, han fallado de manera escandalosa y vergonzosa.

¿Qué resolvieron los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación? Que hubo graves violaciones de las garantías constitucionales de las víctimas del incendio. Pero evadieron lo más importante: que hubo responsables de estas violaciones. Que hay culpables. Es así como se ha demostrado la completa inoperancia del poder judicial para castigar a los culpables de este infanticidio masivo, producto de la corrupción extrema, del tráfico de influencias y de la insaciable sed de ganancias de unos cuantos a costa de todos los demás.

¿En dónde quedó aquella promesa de Felipe Calderón de que habría justicia, “tope en donde tope” y de que habría castigo sin importar quiénes fueran los responsables? ¿Qué pasó con los compromisos de Guillermo Padrés de que la justicia comenzaría al día siguiente de que asumiera su mandato y que destituiría al procurador Abel Murrieta, herencia de su antecesor Eduardo Bours? La falta de voluntad política de los gobernantes actuales para actuar y no sólo prometer no puede ser más evidente.

Pero es en lo profundo de la sociedad, luchando hombro con hombro con otros padres y otras madres, abuelos, hermanos, hijos, todos agraviados, hartos de la impunidad y de los crímenes de una guerra insensata que ya ha cobrado más de 45 mil víctimas en este malhadado sexenio, donde hemos encontrado la mejor respuesta solidaria a nuestros reclamos.

Dos años después seguimos en pie de lucha y ya sabemos que no estamos solos en nuestra rabia e indignación: ¡Por la paz y la justicia!, ¡No más sangre!, ¡Ni perdón ni olvido!

La sociedad sonorense, con las innumerables marchas y la realización de los Juicios Ciudadanos que encontraron culpables, primero, a los socios propietarios de la Guardería ABC y después a 18 funcionarios de los gobiernos estatal y municipal, así nos lo ha manifestado.

De igual forma, el pasado domingo 29 de mayo llevamos a cabo el Juicio Ciudadano al Estado Mexicano, en el Zócalo de la ciudad de México. Donde el jurado declaró culpables por igual a los poderes ejecutivo, legislativo y judicial, a la CNDH, a los altos funcionarios del gobierno federal y el IMSS, por su responsabilidad, negligencia y omisión en el incumplimiento de los derechos humanos más elementales a la vida y a la seguridad de la infancia.

Nuestra eterna gratitud para todas y todos los mexicanos y sonorenses que nos han acompañado como jueces, como testigos, como asistentes en este libre ejercicio ciudadano.

Una vez más, cuando ya han transcurrido 24 meses de la tragedia, estas son nuestras exigencias:

1. Cárcel a todos y cada uno de los responsables directos e indirectos, de la muerte de nuestros hijos e hijas, y de causar lesiones a más de 70 niñas y niños, que los han dejado marcados de por vida.
2. Que los funcionarios o servidores públicos a quienes no los alcancen las sanciones penales, sean sancionados administrativamente y queden inhabilitados de por vida para ocupar puesto publico alguno.
3. Así como lo logramos en el Senado de la República, seguiremos impulsando hasta lograr la expedición por la Cámara de Diputados de la Ley 5 de Junio, la Ley General de Estancias Infantiles, que regule cuidadosamente el funcionamiento y operación, los cuidados, la educación, la higiene, la alimentación y la protección de los niños y niñas en las estancias infantiles de todo México.
4. Mantener permanentemente vivo el recuerdo de nuestros niños y niñas promoviendo la erección de un Memorial que mantenga actualizada su presencia más allá de la vida.
5. Que se instituya el 5 de Junio de cada año como Día Luctuoso Nacional.

A 24 meses del incendio en la Guardería ABC nuestra lucha contra la impunidad y la corrupción no sólo continúa, sino que crece y se fortalece. No claudicaremos en nuestro pleno derecho a exigir justicia ante todas las instancias nacionales e internacionales.

En este segundo aniversario de nuestro duelo y de nuestra lucha, queremos renovar y que se escuche bien nuestro juramento solemne en todos los idiomas y en todas las lenguas; que resuene por todos los países y por todos los rincones del planeta:

“No descansaremos hasta ver juzgados y condenados por este horrendo crimen a todos los verdaderos culpables”.

Ni perdón ni olvido. Juicio y castigo.

MOVIMIENTO CIUDADANO POR LA JUSTICIA CINCO DE JUNIO, A. C.

Hermosillo, Sonora, 5 de Junio de 2011

www.movimiento5dejunio.org